domingo, 15 de marzo de 2015

¡¡ BURGOS...¡¡ MI TIERRA Y MI RAíZ !!

Es el primer sentimiento del año que escribo en mi tierra ¡¡ BURGOS !! Después de muchos días, regreso a tí. El primer contacto que he tenido contigo, no me ha resultado indiferente. Tu temperatura invernal, ha provocado que se erizase mi bello y que se estimularan otras partes de mi cuerpo. Pero...¡¡ estás ahí !! Como siempre. Otro en tu lugar se pondría celoso. Tú sabes de mi amor por Sevilla, pero también eres consciente y sabedor, mi amado Burgos, que TÚ eres...mi Raíz y mi Sosiego, mi Reflexión y mi Soledad. Tus calles, con sus aceras grandes y anchas, por donde pasean los burgaleses de corazón y de adopción y así poder recorrer tus arterias disfrutando del sonido de tu río, El Arlanzón, que tampoco quiere perderse tus paseos y te atraviesa de norte a sur. Ese frío helador tuyo y...tan conocido dentro y fuera de tus murallas, pero....que sueles acompañar de un esplendoroso Sol y de esa fragancia a fresco que se convierte en el perfume que lleva tu nombre...BURGOS, haciendo que pase más desapercibido el frío entre nuestras pieles. Tus silencios tempraneros...aún la ciudad no se ha tomado su chocolate caliente con churros. Cuando vas despertando poco a poco, se nota la vida que existe en tí y la algarabía infantil, ignorando tus temperaturas y jugando con tus nieves enfrentando el frío con valentía, como buenos descendientes del Cid Campeador que somos. TÚ, BURGOS...prepotente, seguro de tí mismo, eres pequeñito, pero te permites el lujo de tu chulería porque... en cada muro, en cada iglesia con su Catedral al frente como abanderada, cada esquina, cada rincón, muestras Historia, Cultura, muestras Patrimonios de la Humanidad. Ahora que piso por primera vez tu suelo desde que empezó el año, soy consciente que tampoco podría vivir sin TÍ. Sevilla es mi Duende, mi Magia, mi Fantasía, mi Alegría y siempre necesitaré de su alimento. TÚ, eres mi Madurez, mi Relajo, mi Paz, mi Serenidad, mis Silencios, mi Soledad. De Sevilla soy amante, pero TÚ eres mi dueño y te pertenezco, porque TÚ eres mi esencia. Qué más prueba de amor y fidelidad a TÍ, que sólo ha bastado que el vapor de aire caliente que desprendía mi boca se ha fundido en un largo y enamorado beso apasionado, al encontrarse con tu frío. TE AMO, MI ADORADO BURGOS. GRACIAS POR RECIBIRME A MI LLEGADA A CASA, COMO SIEMPRE LO HACES, SIEMPRE TUYA. 



Besitos...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Son bienvenidas todas vuestras opiniones