Mi amor por Andalucía y mi pasión por las mujeres, provoca que nazca en mí
el deseo de hablar de
La MUJER ANDALUZA. Su piel tostada...sus ojos grandes y negros al igual que su cabello largo
y negro, todo esto queda fielmente reflejado en la pintura de Julio Romero.
Cuando bailan...es inevitable no caer en su embrujo. Te hechizan con su
contorneo de cintura, sus manos....¡¡¡ ayyyyy !!! Sus manos...las convierten en
bellas flores que continuamente abren y cierran sus pétalos, y...todo
esto, envuelto por esos trajes de múltiples colores y sus volantes que adornan,
más si cabe, su belleza como que fuera un regalo para el que lo ve, esa belleza
que se torna inigualable. Su cabello negro como el azabache, decorado con
adornos que lo único que consiguen es que sea el adorno el decorado. Pero todo
esto se hace "chico" si lo comparamos con la Pasión que exhala cada
poro de su piel y...que se puede respirar con tan solo estar a su lado y...cuya
pasión necesita exteriorizar en su baile, al igual que el magma necesita salir
por la boca de su volcán. ¡¡¡ Ole...ole...y más ole!!!
Besitos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Son bienvenidas todas vuestras opiniones