jueves, 5 de febrero de 2015

MI GARITA

Llámese....lugar, habitación, despacho, oficina, habitáculo, al fin y al cabo, donde paso mis horas laborables cuando no estoy haciendo las rondas de vigilancia. ¿ sábes qué? Le he escrito a muchas cosas, le he escrito a personas, pero jamás te he dedicado unas letras a TÍ, que siempre has estado cobijándome y acompañándome en mis momentos más duros y...también en otros menos duros. ¿Te acuerdas cuando nos conocimos? Yo me sentía tímida y temerosa. Cuando me adentré entre tus cuatro paredes, te vi rodeada de ordenadores, algunos con sus cámaras, otros con la información de las entradas y salidas del personal. Me gustó mucho más tu lado simpático cuando descubrí tus máquinas del café, chocolate, refrescos, pastelitos y...demás goloseo. Ahí fue cuando te ví con otros ojos y me dije que no eras tan severa como me hacías creer. Cuando comenzamos a conocernos, he de confesarte que me pareciste muy aburrida. Sé que tú adivinaste mi sentimiento y por eso....las horas que pasábamos juntas, TÚ ofreciéndome tu silencio y tediosidad y yo a cambio mi compañía, me propusiste que hiciera algo, es decir, que me dabas la oportunidad de "matar" el tiempo que pasaba contigo y con tus ordenadores y de hacer otra cosa a la vez. TÚ, me preguntaste qué quería hacer, y yo...muy tímidamente y por temor a que te rieras, te contesté que me gustaría estudiar una carrera. Te pareció muy buena idea y...así juntas y durante cuatro años, me has acompañado en mis estudios, has compartido mis nervios en los exámenes, y te has alegrado por mis aprobados. También has estado presente al conocer nuevas amistades, alejar a otras, saber de ilusiones y.....estuviste presente cuando la conocí a ELLA. Hemos pasado muchas cosas juntas, TÚ (mi garita) y YO. Ahora, ya han pasado más de cinco años. TÚ, sabes que yo estoy siendo seducida por la Escritura, porque también y....en un acto de generosidad, has permitido que aparezca en mi vida. Ambas sabemos que esta relación, dentro de muy poco, llegará a su fin, porque yo deseo dejarme estremecer entre los brazos de la Magia y de la Fantasía de la escritura. Pero... ¿sábes una cosa? que jamás olvidaré dónde comenzó todo y fue...EN MI GARITA.



 Besitos...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Son bienvenidas todas vuestras opiniones